De acuerdo a la antropóloga Katia Perdigón, señala que este tradicional día se festeja luego de que la Virgen María se purificara a los 40 días después de Navidad, es decir, el 02 de febrero. Desde ese entonces, se volvió una costumbre, para acudir a la iglesia y así, agradecer de que el Niño Dios trajo luz a los corazones de la humanidad. Luego de un tiempo, recibió una revelación divina que manifestaba cambiar el significado y que no moriría hasta ver al Niño Dios. Al final de cuentas, él lleva unas candelas a la iglesia como símbolo de luz y, tras conocer al niño, muere.
E-mail: Martina. Gallagher uth. RESUMEN Objetivo: Adjetivar el contexto en el que los síndromes culturales de las madres de ascendencia mexicana creían que afectaban a la salud infantil y describir cómo ellas mejoraban la salud cuando estos síndromes afectaban a sus hijos. Resultados: Para este grupo de mujeres, los síndromes culturales del empacho, mal de ojo y susto podían provocar trastornos alimenticios y del sueño, causando un desajuste en el bienestar del angelito. Conclusión: Los resultados de este análisis ofrecen una descripción en profundidad de los síndromes culturales y los remedios tradicionales que las madres de abolengo mexicana usaban para promocionar y proteger la salud de sus niños.