Cómo he cambiado me asusto a mi mismo. Es miércoles, día de nominaciones, y me puede tocar a mí. Aquí en la Estación Espacial Internacional no hay piscina, no hay perro, no hay tabaco, no hay fiestas sólo estamos nosotros, los compañeros que decidimos entrar en esta aventura. Antonio Ortega Rodríguez Un mal día 24 de agosto de ; una fecha que Carlos recordaría el resto de su vida Eso, si la nave aguantaba. Debería haber escuchado a su mujer; al fin y al cabo, es raro que una mujer se equivoque en esas cosas.
Esta es una obra de ficción. Nombres, situaciones, lugares y caracteres son producto de la imaginación del autor, o son utilizados ficticiamente, y cualquier analogía con personas vivas o muertas, establecimientos de negocio comercialeshechos o situaciones es pura coincidencia. Hay realidades socialmente incómodas que, a veces, no queremos admirar, pero no por ello dejan de ser menos reales. En este álbum no trato de reflejar a esa superwoman perfecta que limpia con zapatos de tacones, ni a Juana de Arcos, ni al prototipo feminista fuerte e independiente que no depende de nadie nunca, ni a ninguno de esos muchos prototipos socialmente aceptables de mujeres. No le debo nada a ninguna de ellas, me lo debo a mí y a las mujeres que cada día intentan sobrevivir como pueden en el mundo y la sociedad que les ha tocado estar. Mujeres que a veces toman malas decisiones, que tardan en reaccionar, que aguantan lo que les echan… aun el día que alzan la cabeza y deciden que ha llegado el momento de reconstruirse. Tampoco era mi intención poner a parir a los hombres o escribir sobre Arturo y su mesa redonda. La realidad denial se limita a los blancos y negros. Todo depende del punto de vista desde el que se mira, y todos, sin excepciones, somos humanos y cometemos errores.